Son organismos que pueden habitar en el intestino y causar infecciones en el ser humano, por ejemplo: amibas, giardias, lombrices y solitarias.
Los parásitos intestinales se encuentran en:
Los niños son especialmente vulnerables a contraer parásitos porque están expuestos a ingerir huevecillos de estos organismos cuando juegan en terrenos contaminados.
La organización mundial de la salud recomienda desparasitar a toda la familia al menos 2 veces al año.